El Papa Francisco recibe el Premio Carlomagno 2016 por su especial contribución a la unidad europea, ha anunciado este miércoles el directorio de la institución que otorga esos galardones, con sede en Aquisgrán. Francisco se ha convertido en el galardonado número 58 con esta prestigiosa distinción.
Los premios Carlomagno se entregan desde 1950 a personalidades o instituciones que se hayan destacado por los méritos en favor de Europa. El Papa Francisco recibió el Premio Carlomagno en el Vaticano. La ceremonia de premiación se llevó a cabo este viernes en la Sala Regia del Palacio Apostólico.
El Papa recibió el galardón de manos de la canciller alemana, Angela Merkel y de los presidentes de la Comisión Europea, Jean–Claude Juncker; del Parlamento europeo, Martin Schulz, y del Consejo de la Unión Europea, Donald Tusk.
El Premio Carlomagno es otorgado desde 1950 por la ciudad alemana de Aquisgrán, cuyo alcalde Marcel Philipp estuvo presente junto a numerosas personalidades, entre ellas, su Majestad el Rey de España, Felipe VI. El Papa Francisco ha sido el segundo Pontífice en recibir este premio, tras san Juan Pablo II en 2004.
Al finalizar la celebración, el Obispo de Roma pronunció un denso discurso sobre Europa en el que animó a los presentes a aprovechar esta ocasión para desear juntos “un impulso nuevo y audaz para este amado Continente”.
“Sueño una Europa joven, capaz de ser todavía madre: una madre que tenga vida, porque respeta la vida y ofrece esperanza de vida”, dijo el Papa. “Sueño una Europa que se hace cargo del niño, que como un hermano socorre al pobre y a los que vienen en busca de acogida, porque ya no tienen nada y piden refugio”, remarcó el Pontífice. “Sueño una Europa, donde ser emigrante no sea un delito, sino una invitación a un mayor compromiso con la dignidad de todo ser humano”, pidió Francisco. “Sueño una Europa que promueva y proteja los derechos de cada uno, sin olvidar los deberes para con todos –y concluyó– sueño una Europa de la cual no se pueda decir que su compromiso por los derechos humanos ha sido su última utopía”.