Desde el lunes pasado el Hno. Dionigi, Asistente del Superior General y Vicario de los Hermanos de San Gabriel, ha girado visita a las obras gabrielistas en la Ribera del Duero. Han sido cuatro días muy intensos de encuentro, diálogo y de escucha. El Hno. Dionigi ha estado acompañado por el Superior Provincial de los Gabrielistas en España, el Hno. Faustino Besa y, también por el representante de la Congragación en la Ribera del Duero, el Hno. Ángel Llana Obeso.
Intensas jornadas donde se han visitado las comunidades educativas de los Colegios San Miguel, en Roa, y de San Gabriel, en La Aguilera. El Hno. Dinigi ha visitado también la nueva Residencia de Mayores “Ciudad del Bienestar” y ha podido conocer otros proyectos que emergen como el Centro Tomás Pascual Sanz y el proyecto, en fase embrionaria, de Pedrosa de Duero.
El Superiores gabrielistas no quisieron perderse la ocasión de conocer la formación profesional de la comarca en el marco de la Feria de la FP, en la que disfrutaron viendo las interesantes opciones de futuro con las que cuentan los jóvenes de la localidad. Una visita que estuvo acompañada por la Alcaldesa de Aranda de Duero, Raquel González Benito.
Uno de los momentos más intensos de esta visita canónica se produjo el martes pasado, durante el encuentro que el Vicario General tuvo con el Claustro de Profesores del Centro San Gabriel. Compartimos con nuestros lectores el documento de bienvenida escrito y leído por la Pfra. Aintzane Bernaola, Jefe de Estudios del Colegio San Gabriel.
Martes, 18 de febrero de 2020
Es un honor dar la bienvenida al Vicario General del Instituto de los Hermanos de San Gabriel, lo hago con emoción desde este centro gabrielista de La Aguilera en la que he desarrollado prácticamente toda mi vida laboral, más importante aún, casi toda mi experiencia vital, en su congregación que, también siento mía.
En esta casa, los hermanos de San Gabriel nos han transmitido unos valores que puedo resumir como si fueran una línea de metro en el viaje transcendental de la vida, con 14 estaciones como un calvario: servicialidad, sencillez, humildad, paciencia, austeridad, valentía, alegría, confianza, compromiso, acogida, devoción a María, oración, trabajo y trabajo sin fin.
Teniendo en cuenta a todos los hermanos que han dejado huella profunda en su paso por este colegio, humanamente debo decir que el buque insignia era, sin duda, el Hno. Celestino, porque al igual que en la Antigua Grecia, cuando Pericles hablaba, el pueblo decía: ¡Qué bien ha hablado! Sin embargo, cuando hablaba Demóstenes el pueblo decía “En marcha” y él puso a muchos “en marcha” y aún siguen o seguimos. Necesitamos a gente que nos ponga en marcha.
Hablar del Hermano Celestino es hablar de sencillez, de bondad, de cercanía, de entrega, de acogida, de escucha, …Un cerebro incansable, siempre activo, siempre dispuesto a evolucionar y a hacer evolucionar a los demás con planes y proyectos luminosos con el objetivo de conseguir un mundo más justo y más fraterno.
En su condición de religioso hay que destacar su profunda de confianza en la Virgen María y en la Providencia. Y en un aspecto más humano su amor a la naturaleza, su entusiasmo al plantar un árbol y todo el simbolismo que ello encierra y lo entregó todo por y para la educación por y para los jóvenes, por y para la educación de los jóvenes y entregándolo todo, me atrevo a decir que sólo aspiraba a ir a Dios con lo puesto.
Como hombre inteligentísimo que era le recuerdo siempre elegir, ante cualquier dificultad, la sonrisa, el afecto y la fraternidad.
En esa línea queremos trabajar en este Centro tal como lo recoge la Pastoral de este curso: Formar personas felices y buenas, siendo ésta la gran revolución educativa. Queremos ser un colegio que forme personas que en un futuro próximo puedan cambiar el mundo. Y este año de una manera especial lo hacemos Sembrando dentro.
De ello nos habla el 32° capítulo general, de la energía, al mismo tiempo divina y humana, que procede del interior de cada uno tras un encuentro con Jesús.
Así que bienvenido a la utopía educativa, a la utopía gabrielista, que es lo mismo que decir bienvenido a La Aguilera.
Dios le guarde, le ilumine y le bendiga.
Querido Hermano Dionigi: Gracias por visitarnos. Gracias por tu escucha, apoyo y oración. SEGUIMOS EN LA MISIÓN dando continuidad a la obra de San Luis Martía de Montfort, la Obra de Dios. ¡Adelante!