Noticias: Un ejemplo más de que el talento se escribe en femenino

Un sábado de cada mes se celebran las Masterclasses del Proyecto STEM Talent Girl en Burgos, que tienen lugar en el Museo de la Evolución Humana, impartidas por mujeres que han triunfado en sus carreras profesionales dentro del ámbito de las STEM (acrónimo en inglés de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) y a las que pueden asistir todos los alumnos de Secundaria y Bachillerato que estén interesados en realizar alguna de estas carreras o estén buscando información para decidir cuál va ser su destino profesional.

El sábado 20 de enero de 2018 ha tenido lugar la tercera Masterclass impartida por Sara Gómez Martín, Ingeniera Mecánica, Ingeniera de Materiales y Doctora Ingeniera por la Universidad Politécnica de Madrid. Desde el año 1985 desarrolla su actividad docente en esta Universidad, en la Escuela Universitaria de Ingeniería Técnica Industrial. Es miembro de la Real Academia de Ingeniería (RAI), que en octubre de 2016 presentó el proyecto “Mujer e Ingeniería”, para tratar de despertar el interés de niñas y jóvenes por los estudios de ingeniería y arquitectura, acompañarlas y apoyar la incorporación de las mujeres a este entorno profesional, así como motivarlas en su promoción hasta puestos de responsabilidad y alta dirección. Al frente de este proyecto está Sara Gómez.

Uno de los programas que incluye el proyecto es acercar las matemáticas y la física a las niñas, a los niños y a los jóvenes, de otra manera, no contando ni mostrando, sino haciendo, como decía Confucio. El abandono de estas materias en edades tempranas compromete su desarrollo personal y profesional posterior porque les impide poder elegir estudios relacionados con estas materias.

A nivel mundial en los últimos años ha habido un descenso muy importante de los alumnos de las carreras STEM; en ingeniería se ha perdido el 25% de los estudiantes. Países como EEUU y Alemania están trabajando en distintos proyectos para solucionar este problema y la ONU ha dado la voz de alarma ante este problema global, porque si nos quedamos sin ingenieros, el mundo se va a parar. Esto es así, no es solo una gran frase. Irina Bokova, directora general de la UNESCO, dice que el progreso está comprometido si no tenemos tecnología. El progreso y el futuro del mundo están comprometido sin tecnólogos, sin personas que se dediquen a la ingeniería y a la ciencia.

Sara Gómez, con una gran pasión por la ingeniería y la docencia, contó cómo lleva seis años intentando convencer a los jóvenes de que deben estudiar ingeniería y en la actualidad desde el proyecto Mujer e Ingeniería, a las niñas, porque en España el 55% de los universitarios son mujeres y solo un 27% de mujeres estudia ingeniería. Con estos números es evidente la pérdida del talento femenino.

Contó que hay que romper estereotipos, pues hombres y mujeres tienen la misma valía, todos pueden estudiar ingeniería y muchas mujeres destacan en la actualidad en sectores relacionados con la ingeniería.

Los ingenieros no son ni cerebritos ni frikis, y sí tienen vida social. La mayoría de las personas no saben qué hace un ingeniero, especialmente los niños. Están rodeados de tecnología y no saben que todos los dispositivos están hechos por ingenieros.

La ingeniería y la tecnología han cambiado el mundo en que vivimos. La razón de ser de los ingenieros es dar soluciones a los problemas del mundo. Son frases de Irina Bokova y Bernard Van der Merch que resumen lo que es la ingeniería.

Sara Gómez contó como todos los grandes inventos, coches, medios de comunicación, aparatos médicos, construcciones civiles, etc. a lo largo de la historia han sido posibles gracias a los ingenieros. Y entre estos ingenieros, aunque poco conocidas, ha habido mujeres muy importantes cuyo trabajo ha sido desconocido durante décadas.

Entre las ingenieras que cambiaron el mundo no puede faltar Ada Lovelace, cuyo nombre real era Augusta Ada Byron, hija de Lord Byron, que fue matemática e ingeniera y se convirtió en la primera programadora de la historia, que desarrolló el primer software conocido en el siglo XIX.

Hedy Lamarr fue actriz en Hollywood, abandonó los estudios en ingeniería para dedicarse al cine, pero continuó con su pasión por la tecnología, hasta el punto de inventar la técnica del espectro expandido, un método precursor de las comunicaciones de datos vía Wi–Fi.

También recordó a la norteamericana Letitia Geer, que registró una patente sobre una jeringa médica que podía utilizarse con una sola mano.

La película Figuras Ocultas narra la historia de tres mujeres fundamentales para la NASA: Katherine Johnson, que fue la encargada de calcular la trayectoria del primer vuelo espacial; Dorothy Vaughan y Mary Jackson, la primera ingeniera de la NASA.

Concepción Basabe y Zubiría fue la primera mujer española en licenciarse en ingeniería industrial en la Escuela de Ingenieros Industriales de Madrid en 1929, así como la primera mujer que condujo un ferrocarril y obtuvo el título de patrón de embarcaciones de recreo.

María Dolores Norte Gómez inició estudios de ingeniería en el curso 1968–69 y fue la primera mujer española que consiguió titularse como Ingeniera de Minas en el año 1974, especializándose en Energía y Combustibles.

Sara Gómez para finalizar, animó a estudiar ingeniería pues está en marcha la cuarta revolución industrial y esto nos abre las puertas a un mundo profesional lleno de retos y posibilidades, que cambiará nuestra forma de pensar y desarrollará una tecnología que aún no podemos imaginar, que mejorará la vida de las personas. Se desarrollarán tecnologías que permitirán la evolución de la nanomedicina, los vuelos espaciales, los tejidos inteligentes, solucionar el problema de la falta de agua potable, almacenar energía o revertir los efectos negativos del cambio climático.

Chicos y chicas pueden ser ingenieros con trabajo, esfuerzo y mucha pasión. En representación de San Gabriel acudieron las estudiantes Julia de Pablo y Julia Casas, protagonistas del vídeo que os invitamos a visionar más abajo.